Comentario
La victoria de los aliados en la guerra produjo en un breve plazo de tiempo la división de Europa. Hubo una Europa que siguió la senda del comunismo, en parte por las revoluciones que tuvieron lugar durante el período bélico, pero sobre todo debido al influjo de las armas soviéticas. En la Europa Occidental, en cambio, se reafirmaron las formas democráticas, implantándose en naciones que no las habían tenido hasta el momento y adquiriendo rasgos peculiares en las que ya las poseían, de tal modo que bien puede decirse que el sistema político y los contenidos programáticos fueron refundados. Aunque hubo disparidades importantes dependiendo de los países -la depuración, como es lógico, fue una cuestión que no se planteó en Gran Bretaña- existió una coincidencia general en el desarrollo de programas sociales y en la exigencia de la reconstrucción económica.